Jonathan Marcelo, es nuestro mejor exponente en el deporte de las “narices chatas”. El “Depredador” creció en un barrio picante como los “Barracones” del Callao y tiene el sueño de ser el primer campeón mundial peruano, categoría ligero (61 kilos), en este rudo deporte.Es verdad, ¿qué eres el mejor boxeador en la actualidad?
Después de Kina Malpartida, ella merece todo el crédito, pero en cuestión masculina soy el mejor, no quiero ser arrogante, pero es así, y la gente ya lo reconoce.
¿Desde cuando en el boxeo?
Desde los 13 años, yo vengo de un barrio difícil, los “Barracones” del Callao, allí me crié, y en ese lugar antes de caminar aprendes a pelear. Me peleaba mucho en la calle, hasta que unos amigos me dijeron tanto te peleas, vamos a un gimnasio de boxeo, y así nació la pasión por este deporte.
¿Qué ocurrió después?
Era un chiquillo muy complicado, en el gimnasio no hacia caso al profesor, entonces a las 3 o 4 semanas, me hizo pelear para que me peguen, pero ocurrió lo contrario, yo le pegué bien duro al que me pusieron al frente. Allí me di cuenta, que sin entrenar bien, respondí, y luego ya me hice mas disciplinado.
Soy un tipo muy guerrero, eso lo llevó en la sangre, nunca me gustó perder, siempre he sido muy picón y eso a un boxeador ayuda bastante.
¿A dónde apunta ahora Maicelo?
No habló de muchos títulos, sólo uno, Campeonato Mundial: OMB o AMB, los más importantes, soy consciente que eso viene poco a poco, ese es mi sueño.
¿Cómo va el camino al sueño tuyo?
El trabajo de un boxeador es lento pero seguro, en el caso de hombres, tienes que pelear unas 20 veces para luchar por un título, estoy en la octava. Este año cerraré con cinco peleas más y al año siguiente responderé a las veinte, por lo que, en dos años más estaré disputando un Título Mundial.
¿Estás muy convencido de lograrlo?
Soy una persona que nunca tuvo nada fácil, sufrí mucho, toqué muchas puertas, gracias a Dios, el colegio “Los Reyes Rojos” donde trabajó y otras empresas me apoyan. Ahora soy una persona muy disciplinada.
¿Nada de vicios?
El único vicio es mi señora.
¿Cuántas horas diarias entrenas?
Entrenó cinco horas diarias, incluso sacrificó horas de trabajo. Me levantó muy temprano a las 6 de la mañana para correr, luego vengo al Colegio, después me voy a entrenar a la “Bombonera” en el Estadio Nacional, llegó a las diez de la noche a mi casa. Es duro, pero a la hora de pelear se me olvida todo y salgo a noquear.
¿Sigues viviendo en el Callao?
Así es, estoy trabajando para darle una mejor calidad de vida a mi familia, eso es mi motivación, por eso no siento cansancio, dolor, no siento nada.
Sabes que muchos boxeadores estuvieron cerca de lograrlo como: Orlando Romero, Oscar Rivadeneyra, pero lamentablemente no pudieron…
Estoy muy orgulloso de esa gente, lo dieron todo en la cancha. He visto sus peleas, y ninguno de ellos fue menos y estoy seguro que si volvían a pelear la ganaban.
Acá los peruanos si los futbolistas pierden, siguen creyendo en ellos, por eso digo, que si pierdo una pelea, sigan creyendo en mí. Cuando peleé el título mundial lo quiero disputar acá, para que toda la gente me apoye.
¿Te molesta cuando observas tanto apoyo a los futbolistas?
No soy envidioso, los futbolistas no tienen la culpa, igual que yo, son deportistas. La gente ve un solo deporte, y eso si me molesta, por eso, quiero que me vean boxear para darles una alegría.
¿Cuándo es tu próxima pelea?
La gripe porcina me está matando, iba a pelear con otro mexicano, pero ha quedado cancelado, quiero uno más guerrero, porque a todos los estaba noqueando. Tengo que seguir haciéndolo, no puedo parar, para lograr mi meta final. Mi representante está buscando ahora un rival para el 31 de mayo, estamos en eso.
En nuestro medio, ¿no tienes rivales?
Ninguno, nadie quiere pelear conmigo, ni los que están afuera, ni los que están aquí.
¿Qué sucede, te tienen miedo?
Respeto a la gente como persona, pero a la hora de pelear, no respeto a nadie, a quien me pongan lo noqueó.
¿Tienes hambre de gloria?
Peleó por dos razones: para mi familia y para el público. Cuando viajaba por el Mundo siendo amateur, hablaban de fútbol, que Argentina es buena, y no me podía meter, porque Perú no ha logrado muchos resultados, por eso, quiero que algún día, alguien se sienta orgulloso de mí, y diga en fútbol somos malos, pero en boxeo te ganamos.
Todos mis rivales han caído en tres asaltos, reitero en dos años me verán con mi cinturón de campeón, me tomarán fotos y pondrán mi nombre en los laureles deportivos, es mi gran motivación.
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